El argentino Eugenio Canevari presentó su película en la sección nuevos directores. Trata sobre Paula, que vive y trabaja en la estancia de una familia burguesa de la provincia de Buenos Aires cuidando a los hijos de la familia. Su vida toma un giro inesperado al descubrir que está embarazada de un ex novio que no se hace cargo. Paula decide esconder el embarazo y busca el aborto como solución, pero al estar sola y sin dinero, su situación se complica. Mientras tanto en la estancia están ocupados con los preparativos de la fiesta de cumpleaños de Nachi, uno de los hijos pequeños de la familia. Nadie parece percibir el embarazo de Paula y sus posibilidades se irán agotando a medida que su embarazo avanza.
Se supone que va de eso, es lo que se intuye, aunque el director está empeñado en buscar nuevas y transgresoras formas de hacer cine poniéndoselo difícil al espectador hasta el punto de agotar la paciencia de cualquiera. Esta insoportable película afortunadamente solo dura una hora, pero no se preocupen, la experiencia es como si fuera de dos. Seré yo un rarito, pero cuando voy al cine me gusta entender lo que veo, me gusta que me cuenten algo. Y no estoy diciendo que me den las cosas mascadas, estoy pidiendo un mínimo de lógica y compasión hacia el espectador. Sí, compasión. Suena exagerado, pero si han visto la película sabrán a lo que me refiero (espero).
Creo que no hay nada salvable, tampoco las interpretaciones. La protagonista Denise Labbate podría cambiar su expresión facial, aunque sea por lo menos cada veinte minutos, no pido más.
Cine experimental, pretendidamente profundo y sin embargo, vacío hasta la extenuación. Pretenciosidad infumable.
1/10
DRIFTERS
Minna, que se gana la vida trapicheando droga, tiene dificultades para pagar el alquiler, por lo que, tras timar a unos delincuentes, huye con el dinero. Se encuentra con Katja, una madre a la que los servicios sociales han retirado la custodia de su hijo. Minna y Katja se trasladan a una residencia ilegal a las afueras de la ciudad, donde un grupo de personas ha decidido unirse y elegir sus propias condiciones de vida. Pero uno de los hombres a los que Minna engañó la anda buscando, lo que acarreará consecuencias impredecibles a todos los habitantes de la residencia.
El director sueco Peter Grönlund presentó este drama social en clave feminista, que aunque es entretenido, siempre resulta más banal de lo que pretende. Sus intenciones son de ser algo muy sórdido, e intenso, y desgraciadamente es difícil tomárse la película tan en serio. Además, no tarda en caer en el telefilm de sobremesa a la primera de cambio. Se agradece que por lo menos se entienda (acabábamos de ver Paula), y que los actores están bien. Pero todo está contado bajo una dirección rutinaria, y con un guión que es un tópico tras otro. Se deja ver, pero no aporta absolutamente nada nuevo.
4/10
PARASOL
La película belga de Valéry Rosier trata sobre las vacaciones de verano en Mallorca de distintas personas: un joven inglés, una jubilada francesa, un padre y una hija que son de allí, etc.
Decir que esta película es cutre es quedarse muy muy corto. La fotografía está tan descuidada que da pena. Está hecha con muy poco presupuesto, y eso hay que valorarlo, pero si no dispones de medios, qué mínimo que tener un guión decente. Parasol no lo tiene. Creo que intenta ser graciosa, y desde luego no lo es en absoluto. Igual para un corto de cinco minutos hasta funciona, pero una hora y media tomando el pelo al espectador es muchísimo. No hay nada que se pueda destacar. Parece una película hecha en 2 días y con cinco euros. Y con mal gusto.
1,5/10
MOUNTAINS MAY DEPART
Tras su paso por el Festival de Cannes, el director chino Jia Zhangke presentó su película en San Sebastián en la sección Perlas. La película cuenta la historia de una mujer durante tres etapas de su vida. Una en 1999, otra en 2014 y otra en 2025.
Se trata de un melodrama cuya primera hora y media es una absoluta preciosidad. Narrada con un talento, con una maestría y una sensibilidad que conmueven. El tercer acto descoloca un poco al espectador, pues parece otra película totalmente distinta, sin embargo, tras la última y absolutamente maravillosa escena entendemos el porqué y todo encaja. No voy a valorar a esta película por episodios, sino en su totalidad, porque creo que el conjunto de todos ellos son los que la hacen verdaderamente gigante. Es una experiencia total. Una película libre, desacomplejada, donde todo respira y emociona. La dirección de Jia Zhangke es soberbia. Un gran acierto es la elección de utilizar diferentes formatos según qué epoca. Además la película cuenta con escenas visualmente potentísimas, acompañadas de una música que casa perfectamente con lo que se nos está contando. Inolvidable cuando suena Go West de Pet Shop Boys.
Lo que no se puede dejar de comentar es la impresionante interpretación de Zhao Tao, que ofrece un verdadero recital de sentimientos y emoción. Si la película funciona tan bien es en parte gracias a ella. Una actuación digna de premios.
Se le puede acusar a Mountains May Depart de ser irregular en su última parte, pero lo demás es tan potente y está tan lleno de fuerza, que es imposible juzgarla por eso. Imperfecta pero perfecta. Obra maestra.
Para el que escribe esto, la mejor película del festival y una de las mejores de los últimos años.
9/10
No hay comentarios:
Publicar un comentario