Más allá de las montañas - Hacia el oeste

China, a finales de 1999. Tao, una joven de Fenyang, es cortejada por sus dos amigos de la infancia, Zang y Lianzi. Zang, propietario de una estación de gasolina, está destinado a un futuro prometedor, mientras que Liang trabaja en una mina de carbón. Su corazón está dividido entre los dos hombres, y debe tomar una decisión que sellará su destino y el de su futuro hijo.

Jia Zhangke presentó en 2015 en la sección oficial del Festival de Cannes 'Mountains May Depart' ('Más allá de las montañas') dos años después de haberse llevado el premio al mejor guion por esa excelente y mordaz crítica a China que es 'Un toque de violencia'. Injustamente, en esta ocasión, se fue de vacío en el palmarés. Meses más tarde se estrenó en la sección Perlas del Festival de San Sebastián (donde tuve ocasión de verla por primera vez) recibiendo la acogida que se merecía.
Zhangke divide la historia en tres partes (una en 1999, otra en 2014 y la última en 2025) para contarnos la historia de una mujer que está dividida entre el amor de dos hombres, y cómo su elección altera su vida a lo largo de los años. Cada una de ellas está rodada con un formato diferente (4:3; 1:85 y 2:35 respectivamente) haciendo referencia a los distintos cambios que se van dando con el paso del tiempo. 
'Más allá de las montañas' es una película totalmente libre en su estructura narrativa, y eso es lo que le hace ser una de las experiencias cinematográficas más estimulantes en años. También una de las más ambiciosas. Zhangke crea un melodrama emocionante y conmovedor, plagado de momentos memorables. Como cierta escena en la que suena por primera vez la canción Take Care de Sally Yeh; una en una fiesta; otra que por no hacer spoilers no entraré en detalles, que solo diré que es la más desgarradora de toda la película; o como las que abren y cierran el film. 

Durante las dos primeras partes, seguimos a Tao, interpretada por una inconmensurable Zhao Tao, que ofrece una de las mejores interpretaciones que se han visto en una pantalla en mucho tiempo. Compone un personaje muy humano, fuerte y vulnerable al mismo tiempo. Una actuación que sin duda merece muchos más reconocimientos que los que se le han otorgado.
En la tercera parte (que sucede en Australia y está rodada en inglés), la película da un giro completo, en el que se nos presenta a un nuevo protagonista. Este cambio puede parecer en principio desconcertante, pero resulta el broche de oro para concluir la historia. Es posible que sea el que tenga más detalles de los que no se ven a simple vista. Zhangke, como viene siendo habitual en sus películas, aprovecha este último acto para hacer una crítica al capitalismo y todo lo que eso conlleva (globalización, pérdida de raíces y de identidad, etc). 
Si a todo lo que ha sido contado anteriormente (de manera magistral), le añades este tercer bloque, nos queda una película totalmente insólita, única y redonda, que solo un genio sería capaz de dar a luz. Además, posee una secuencia final simplemente maravillosa, que le deja a uno sin palabras y absolutamente emocionado. Para levantarse y aplaudir hasta que desaparezca el último nombre de los créditos. 

Imprescindible destacar el uso de la música, que se utiliza como un recurso narrativo circular con la canción Go West de Pet Shop Boys. El uso (y la elección) de este tema en el film es muy inteligente porque nos describe sutilmente el rumbo de la película, y suena en los momentos más claves, sin resultar en absoluto obvio.
'Más allá de las montañas' es una película libre, luminosa, viva, que se despoja totalmente de convencionalidades, que evita lugares comunes, y que finalmente, nos deja uno de los mejores melodramas que se han rodado en este siglo. La obra maestra de uno de los directores más interesantes y con más talento en activo.
9/10

No hay comentarios:

Publicar un comentario